Isla de Francia
Isla de Francia
Con su capital, París, como punto de referencia mundial, la región ofrece una amplia variedad de atracciones turísticas, desde sitios históricos hasta experiencias gastronómicas inolvidables.
Te guiaremos a través de los aspectos más destacados de la Isla de Francia y te ayudaremos a planificar tu viaje perfecto.
Cómo llegar
Está ubicada en el norte de Francia, a unos 2 horas en tren desde Londres y a una hora desde Bruselas.
Si vienes de más lejos, puedes volar al aeropuerto Charles de Gaulle de París o al aeropuerto de Orly, ambos con conexiones aéreas con todo el mundo.
Una vez en la región, puedes moverte fácilmente en transporte público o en coche.
Mejor época para viajar
La Isla de Francia tiene un clima templado, lo que significa que es agradable para visitar durante todo el año.
Sin embargo, la temporada alta turística es durante los meses de verano, de junio a agosto, cuando las atracciones turísticas pueden estar más concurridas.
Si prefieres evitar las multitudes, puedes visitar la región en primavera u otoño, cuando las temperaturas son más suaves y las multitudes son más pequeñas.
Cultura
Es rica en historia y cultura, con muchos lugares para visitar.
Por supuesto, la Torre Eiffel y el Louvre en París son imperdibles, pero también hay muchos otros sitios de interés cultural en la región, como el palacio de Versalles y la catedral de Chartres.
También puedes explorar algunos de los muchos museos y galerías de arte de la región.
Gastronomía
Es conocida por su deliciosa comida, desde croissants y baguettes hasta platos más elaborados como el coq au vin y el boeuf bourguignon.
También puedes probar algunos de los famosos quesos de la región, como el Brie y el Camembert.
Y, por supuesto, no te pierdas la oportunidad de probar los vinos locales.
Rutas e itinerarios
Puedes seguir los pasos de los impresionistas en Auvers-sur-Oise, pasear por los jardines de Versalles o explorar las aldeas con encanto de la región.
También puedes hacer una excursión a las afueras de París, como el Palacio de Fontainebleau o la ciudad medieval de Provins.